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jueves, 16 de junio de 2016

El parque Gulliver y ¿posible regreso?

¿Hola?....
¿Queda alguien por aquí?...
¡Bufff!, ¡como está esto después de dos años!. Habrá que quitar el polvo un poco... y limpiar los cristales y eso...

 Pues casi dos años después de mi último post del VDLN dedicado a Bowie (que la tierra le sea leve) me vuelvo a pasar por aquí. Y ¿Por qué después de tanto tiempo? Pues todo se debe a un mensaje en twitter de Con los niños en la mochila, en el que me pedía una reseña de algún lugar que conociera para ir con los niños y, la verdad, me apetecía volver a escribir algo. No se si a partir de ahora retomaré de nuevo el blog o este será un post aislado pero bueno, ¡ya se verá!

La familia Petit ha tenido varios cambios durante este tiempo. Como supondréis, los peques han crecido. JoanPetit ya no es un bebé y es todo un niño y NaiaPetita va obteniendo logros, el próximo "monstruo final" será la operación pañal

 Pero el cambio más importante es que hemos dejado nuestra pequeña y tranquila ciudad para trasladarnos a Valencia, que tampoco nos pilla tan lejos pero ya es un cambio... Si hay más posts en el futuro ya os iré explicando las novedades pero hoy quería comentaros sobre el lugar que más les gustó a mis hijos (sobre todo a Elpeque) cuando llegamos aquí y es ni mas ni menos que:

  EL PARQUE GULLIVER
 
 El parque Gulliver se encuentra en el cauce del río Turia, el gran parque urbano de Valencia que cruza la ciudad de Oeste a Este, muy cerca de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. 

 Nada más entrar al parque (además sin rascarte el bolsillo) te sentirás como un Liliputiense. Esos personajes que se encontraron un día en la playa a un naufrago llamado Gulliver que era 100 veces más grande que el mayor de sus guerreros. 

Verás a Gulliver tumbado en el suelo atado con cuerdas por las que podrás trepar. También podrás encaramarte a su cuerpo y deslizarte por los toboganes que forman sus ropas, sus cabellos, sus zapatos, etc. 

 La figura de Gulliver es enorme y está diseñada con materiales blandos y con formas redondeadas para que los peques estén seguros en todo momento. Los padres podremos acompañarlos sin problemas a todas partes por lo que no os preocupéis si vuestros "nanos" son muy pequeños, pueden jugar niños de todas las edades. Eso sí, preparaos físicamente antes. Sacad vuestras zapatillas de runnning o apuntaros a un gimnasio porque ese día acabaréis destrozados de tanto subir y bajar por encima de un gigante. Lo bueno es que casi disfrutan más los mayores que los pequeños. 



 El único pero es que hay muy poca sombra cerca y ninguna en la zona de juego. Así que prepárense señores porque en Valencia hace calor... sobre todo en agosto. Mucha cremita solar y gorras para luego no tener disgustos y acabar como guiri en Mallorca. 

 Yo disfruto mucho en este parque con mis hijos. Nos tiramos por los toboganes en familia (algunos son enormes), jugamos mucho y además luego puedes dar un paseo por el cauce del Turia que es una maravilla, o tomarte una horchata, o comerte una paella, o quemar una falla, es decir, esas cosas que hacen lo valencianos todos los días... 

 Pues nada más. Intentaré seguir escribiendo pero no prometo nada.